Los efectos del ghosting en Internet y cómo superarlo

Internet nos permite conocer personas fuera de nuestros lugares comunes, sean trabajo, escuelas, universidades, etcétera. A veces sale bien, conectamos con otros y nace una bonita relación de amistad, laboral o, por qué no, romántica, pero como puede salir bien, también puede acabar mal.

Uno de estos finales "malos" de las relaciones virtuales hoy en día es el ghosting, una tendencia que, como veremos, no empezó con Internet y las redes sociales, pero que ellas han reinventado para darle un nuevo significado.

Una definición de ghosting

Hablamos de ghosting cuando una persona corta todo tipo de relación y comunicación con otra sin ningún aviso previo. Puesto de otro modo, es desaparecer por completo de su vida.

El ghosting es tan antiguo como la historia humana, pero de unos años hacia acá ha cambiado debido a Internet, servicios de mensajería como WhatsApp y Telegram, y especialmente aplicaciones de citas como Tinder y Bumble. Todas estas plataformas nos permiten conocer personas a distancia y sin haber coincidido antes en un lugar, lo que, en cierta forma, nos ayuda a esfumarnos.

Aunque comúnmente se usa para las relaciones amorosas, el ghosting aplica para cualquier tipo de relación, sea entre amigos, conocidos, familiares, compañeros de trabajo, etcétera.

Causas

El ghosting sucede por varias razones, desde la falta de madurez emocional de quien corta la relación hasta no querer lidiar con las consecuencias de una decisión difícil como es alejarse por completo de otra persona, pasando por el miedo hacia dicha decisión y la falta de voluntad para ello.

En todo caso, es importante recordar que la responsabilidad del ghosting no cae nunca sobre la víctima, sino el victimario, quien decide desaparecer y bloquear, eliminar o ignorar a la otra persona en todo medio de comunicación.

Consecuencias del ghosting

Según el nivel de compromiso con la relación, sufrir de ghosting puede dejar consecuencias graves en la persona a partir del autocuestionamiento y los sentimientos de duda e inseguridad que una situación así puede generar. A grandes rasgos, las consecuencias del ghosting se pueden resumir en:

• Pérdida de autoestima
• Ansiedad
• Depresión
• Dificultades para conocer personas o iniciar nuevas relaciones
• Ataques de pánico
• Aislamiento

Ghosting y nuevas tecnologías

El ghosting existe desde siempre, pero Internet y sus diferentes espacios, principalmente redes sociales y aplicaciones de citas, han dado un nuevo significado a esta situación, y lo podemos ver a través de estos elementos.

Superficialidad

A menos que se apoyen en encuentros presenciales anteriores o posteriores (y eso no es garantía), las relaciones que empiezan en Internet tienden a ser superficiales, siendo que conocemos y conversamos con otros por razones como:

• Comentarios o contenidos que nos agradan
• Amigos o intereses comunes
• Compartir espacios similares (Twitter, foros, servidores, redes sociales...)
• Etcétera.

En esta situación, es muy fácil no sentir un compromiso verdadero con la otra persona si no hay reuniones presenciales o conversaciones virtuales genuinas que nutran o fortalezcan la relación.

Anonimato digital

Es importante considerar el carácter anónimo que nos da Internet. Más allá de las opciones de personalización que nos ofrecen sus espacios, somos personas desconocidas para la mayoría de usuarios, siendo unos pocos quienes nos han visto.

Esto le facilita a las personas desaparecer, ya que pueden pensar que se están alejando de desconocidos fuera de sus círculos sociales. Esto pasa mucho en aplicaciones como Tinder y Bumble, donde las personas conectamos con otras solamente a partir de fotos, intereses y biografías.

Facilidades de evasión

Este punto trata, por un lado, de las distintas opciones que nos ofrece Internet para cortar comunicación con otros y desaparecer de sus vidas. Podemos silenciar, bloquear, marcar su contenido como spam, eliminar chat o match en aplicaciones de citas.

Por otra parte, está la misma simpleza para usar esas opciones. Muchas veces, solo con unos clics podemos minimizar o anular por completo la presencia de una persona en nuestra vida digital. Para quien hace ghosting, es un escenario ideal; para la víctima, aterrador.

Este elemento en particular fortalece mucho la idea de que, en redes sociales, deshacerse de la gente es muy fácil, algo que apunta Sherry Turkle, socióloga y profesora del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT), a la hora de estudiar la psicología de las relaciones humanas en espacios virtuales:

Con las nuevas tecnologías nos hemos acostumbrado a deshacernos de la gente simplemente no respondiendo [...] Esto tiene serias consecuencias porque, cuando nos tratan como si pudiéramos ser ignorados, empezamos a pensar que eso está bien, y nos tratamos a nosotros mismos como personas que no han de tener sentimientos. Al mismo tiempo, tratamos a los demás como personas que no tienen sentimientos en este contexto, por lo que empieza a desaparecer la empatía.

Me han ghosteado: ¿cómo lo supero?

El ghosting es una situación desagradable para la víctima, independientemente del nivel de compromiso con la relación. Entre los sentimientos de duda, confusión y desánimo que le siguen, puede ser difícil tener claro qué hacer para seguir adelante.

Curiosamente, Bumble tiene una publicación en su página donde ofrece una guía de pasos que los usuarios de la app y personas en general pueden tomar en cuenta si han pasado por esta situación. Aquí la adaptaremos.

Date tiempo y espacio para sentir

Lo mejor que puedes hacer por ti es permitirte sentir las emociones que te deje la situación. Si las dejas fluir y las procesas con las actividades que te ayudan a gestionar tus emociones, será más fácil y rápido para ti salir de este conflicto.

No intentes darle lógica

Si bien puede pasar, es probable que nunca encuentres las respuestas o cierre que necesitas y mereces para una situación así. No te tortures buscando sentido, signos o cosas que sientas que pudieron adelantar el ghosting. No te hará bien.

Llama a un amigo

Si sientes que la situación te supera y necesitas a alguien con quien desahogarte, llamar a un amigo es válido. Después de todo, son personas que te entienden, te aprecian y te pueden ofrecer un lugar seguro donde ser tú mismo y expresarte sin miedo.

Camina

Sí, lo hacemos todos los días, pero caminar tiene un efecto importante cuando nos concentramos en algo, como una nueva idea o, en este caso, un caso de ghosting. La razón de esto es lo que la neurología y psicología llaman estimulación bilateral, una técnica donde ambos hemisferios del cerebro humano trabajan en simultáneo.

En pocas palabras, esto estimula el sistema nervioso central y nos permite sentirnos mejor con las experiencias difíciles de nuestra vida.

Haz lo que te gusta

Hacer las actividades que te llenan y hacen sentir en buenos términos con la vida siempre es positivo y, en esta situación, te ayudarán a gestionar mejor lo que sientes.

¿Quieres dedicar tu domingo a jugar videojuegos? Adelante. ¿Quieres leer una saga entera de libros? Sin problema. Siempre que seas responsable contigo mismo y entiendas tus límites, todo estará bien.

El ghosting en Internet es una posibilidad hoy en día cuando muchas relaciones, sean del tipo que sean, empiezan o pueden empezar con un like, comentario, o un mensaje. Aun así, que el ghosting sea posible no debe ser motivo para cerrarnos por completo a conocer personas en el mundo virtual.

Si somos personas comunicativas, expresamos cómo nos sentimos con tanta claridad como nos sea posible y tomamos en cuenta el sentir de las personas con quienes compartimos, es seguro que nos ahorraremos muchas malas experiencias en general. El ghosting es una de ellas.